¿Quién cuida de los cuidadores? ¿Quién ayuda a los que se dedican a ayudar a los demás? Este es el caso que se nos presenta en esta nueva entrega de "Historias de Diván". Un prestigioso psiquiatra acostumbrado a ayudar a otras personas se encuentra frente al laberinto de su propia existencia y con sus propios conflictos personales sin resolver. A veces olvidamos que por encima del rol que representamos en la sociedad, todos somos seres humanos. Eso nos iguala para lo bueno y para lo malo. Por eso aquellos que se parapetan detrás de su rol profesional o estatus social se llevan la peor sorpresa de su vida cuando se encuentran con ellos mismos. Quizás habría que recordarles aquella frase de Aristóteles que se menciona al principio de este capítulo: "La dignidad no consiste en nuestros honores, sino en el reconocimiento de merecer lo que tenemos"...... Y recuperando nuestra humanidad seremos más eficaces en nuestra ayuda.
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